Ayer vi caras, escuché personas, contemplé gestos y me percaté que esas caras, esas voces y esos gestos no se diferencian nada de lo que yo siento, pienso y trato de transmitir este momento. Vi caras de impotencia, que no de resignación, que ven que sus palabras y sus esfuerzos no obtienen respuesta. Caras de rabia contenida por tratar de comunicarse y no ser escuchados. Caras de esfuerzo, poniendo a disposición de la comunidad muchas horas que han restado de estar con sus familias y con sus hijos, por luchar por el bienestar y los derechos de muchas otras familias y de muchos niños y niñas del Campello. Pero sobretodo, vi caras de indignación que no entienden porque nuestros gobernantes no les quieren recibir, no les quieren escuchar, no les dan soluciones claras, ni razonamientos lógicos. Las caras que os describo, son las de las mujeres y hombres que componen la comunidad escolar campellera (AMPAS, profesorado....), que vienen reivindicando desde hace muchos meses la no supresión del Gabinete Psicopedagógico Municipal. Apoyan y exigen un servicio que durante 25 año ha sido la puerta de entrada a la integración educativa de nuestros hijos, además de un eficiente asesor de muchísimas familias con unos resultados excelentes. Un servicio qué quieren hacer desaparecer de un manotazo por el encaprichamiento de una concejala de educación poco dialogante, avalada por un alcalde que cada vez se aleja más de las necesidades de sus vecinos y la justificación demagógica de la crisis económica (la única que hasta ahora han manifestado), sin pensar en el prejuicio que representará para muchos niños/as del Campello. Sr. Alcalde, Sra. Concejala, no se excusen en la crisis, no justifiquen la supresión del Gabinete con la supuesta austeridad económica que debe regir en estos tiempos o con el supuesto servicio (¿gratuito?) que nos darán desde otras instancias. Yo les daré argumentos para repensárselo: dejarán en manos de no sabemos quien, el control de la evolución educativa de nuestro pueblo; dejaremos de tener mecanismos municipales para detectar problemas, diagnosticarlos y elaborar pautas de trabajo para los educadores, las familias y los niños/as escolarizados. Y un argumento muy importante y que tanto les preocupa como es el económico, tiene fácil solución con una simple reducción de la amplia lista de personal de confianza (asesores, como se dice por el pueblo), que aún la mayoría de ellos no han justificado ni los elevados sueldos que cobran, ni el trabajo de asesoramiento que realizan, salvo alguno que si hemos tenido la oportunidad de ver como hacía campaña electoral para el partido en jornada de trabajo municipal. Espero que con estas reflexiones, alguien se lo piense muy bien antes de dar el paso de la supresión y en breve podamos ver transformadas las caras que he mencionado antes en otras de satisfacción, alegría y de gozo, por el bienestar y la tranquilidad de los escolares campelleros. Al menos, la comunidad escolar campellera debe saber que con la gente del BLOC pueden contar para mejorar la educación en El Campello y la atención a los nuestros escolares. Antoni Calvo Marco Concejal de G.M. del BLOC - Miembro del AMPA del colegio Rafael Altamira
Las Caras de la Educación al Campello
Ayer vi caras, escuché personas, contemplé gestos y me percaté que esas caras, esas voces y esos gestos no se diferencian nada de lo que yo siento, pienso y trato de transmitir este momento.